El sofá cama, un clásico en el hogar

Desde hace muchos años, aquí en nuestro país, la opción más recurrente para los invitados, ha sido y será el sofá cama.

La ecuación que conforma la unión de pisos pequeños por un lado y de una extensa familia, que vive fuera de nuestra zona (lejos se entiende) o muchos amigos que también se encuentran lejanos en muchas ocasiones, por otra parte, hace que se nos presente como la mejor solución la compra de un sofá cama, cuya variedad de modelos es también infinita. No obstante, se recomienda que su estructura sea de madera o de poliéster y que los somieres sean de láminas de madera, o de malla metálica para prevenir terribles dolores de espalda.

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Tipos de sofá cama

Dependiendo del espacio y de las necesidades de cada hogar, las posibilidades pueden ser, las siguientes:

Sofá extensible: Tiene como ventaja que el asiento y el respaldo son una misma pieza, que cuando se hace cama, se despliega horizontalmente. Siendo muy útiles para espacios pequeños.

Sofá acordeón: aquí la cama se esconde tras los cojines del sofá. Una vez que éstos se quitan se baja el respaldo y la cama se abre. Requiere de un mayor espacio que el modelo anterior.

Sofá nido: La principal ventaja es que se puede guardar la cama ya hecha porque se esconde bajo la estructura del sofá, pero tiene el inconveniente de que el espacio debe ser mayor, equivalente al sofá.